Me pierdo,luego existo. Más perdida
que un burro en un garaje.
Tengo cara de móvil Samsung de a 0
euros, ese que para ver el número de un contacto lo tienes que poner
en horizontal para leerlo todo, dado su tamaño.
Hasta que los Reyes Magos –si los
dejan pasar por la frontera europea-, no me regalen uno de esos que
hace de todo (te asusta al mirar los 120 látidos, ojos azules,
tiarro a la derecha o pone en marcha el aspirador-raso persiguiendo
toda mota viviente),hasta entonces, sigo con mi comunicador inútil
pero vital.
Soy una esclava de la tecnobobía (te
hace bobo total, emoticono: lengua fuera, ojo guiñao). Ahora resulta
que hay Apps
(“A pimplar por sitios”) que te inducen al “voto
consciente”... ¿Consciente de qué?
¿De qué cada día estamos
más manipulados, idiotizados y aborregados?.
Una App que se activa al poco de
comenzar cada campaña electoral y aporta datos de los programas de
los candidatos, sus mentirijillas Twiteras y Facebookeras,
Instagrando fotos de sonrisas más falsas que un euro madera... Y con
Inputs que teclearás bizco total, llegarás a tal maravilla de
información que podrás decidir (¡Oh, César!) cual será el
siguiente que nos subirá el Iva para después bajarlo, que nos
bajará el IRPF para después subirlo y que loará a aquellos
empresarios que contraten indefinidos siempre que indefinidamente
produzcan a tope con un salario más que mínimo bajoprofesional.
Ya sabes, solo te falta la App para que
dejes de pensar. Se han dado cuenta que para la salud de algunos, PENSAR es contraproducente porque puedes tomar decisiones.
¡Viva la tecnobobía!
*
http://www.lavanguardia.com/tecnologia/20151204/30596007859/tecnologia-aplicaciones-elecciones-20d.html
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