PASEN Y VEAN: "Bufandas tejidas a mano con luz de estrellas, canelones de espinacas de la abuela y pan moreno de 8 cereales...como antaño". LA CALIDEZ DE LO RETRO Y DEL TRABAJO BIEN HECHO.

No me aclaro. Eso quiere decir que me siento oscura y espesa cual caldo lentejas. Por mucho que estos políticos -más pesimistas y negros que yo- avisen, digan y repitan"Quien avisa no es traidor" ,yo es que aunque confusa y sin aclararme creo en el futuro. ¡Si, en el futuro, ese de "a la vuelta de la esquina"!.

Será porque me han enseñado -las vivencias y los desengaños-, a sobrevivir con lo que se tiene.Y si ese día se tiene más y no debes a nadie, aprovechar para ir con tus magos amigos de menú ,sin lujos pero de buena cocina con buen vino y reirnos de las fruslerias de las que no podemos en otros momentos.

¿No deberiamos  fomentar el optimismo con poco dinero pero con un mucho de compañerismo? ¿Abrazos y besos? Esos que son baratos y generosos. Un buen oido para escuchar el mal día que lleva tu congénere porque ese regalo es algo verdaderamente serio y agradecido. Y es más, es lo único que nos queda.
Da igual que vayas vestido de marca o tengas piso guay y coche que te cagas. El escuchar es compartir , como si vas en pelotas. Sin etiquetas. Eso une.

 No nos debemos hundir. No debemos permirtirlo. Nos quedan las agallas de pez de cuando hace millones de años, éramos. Y el tener agallas es trampear y torear a la mala suerte. Con poquito pero sin ratear si puedes. ¿No ves que si más o menos te da el bolsillo
das de comer a otros? ¿No ves que si en vez de ir a un chino a comer - sin menospreciarlo por supuesto- pero yendo a comer a un restaurante de toda la vida, de la cocina de la abuela, tu estómago te lo agradecerá y probarás otras creatividades de las que ahora abundan?

Lo mismo a la hora de comprar algo que nos guste mucho. Mejor una pieza que nos encante de rebajas o en su precio  que no doscientas de mercadillo. En esta vida estamos para el disfrute porque lo malo viene solo ¿o no?.

De que manera con nuestra actitud estamos hundiendo comercios, restaurantes de  toda la vida y que se han mantenido gracias a su estilo propio y a su calidad. Fomentemos al tendero porque cada día que pasas por delante te pone una promocíón con gracia y
salero. ¡Canelones de la abuela de espinacas! ¡Bufandas hechas a mano! ¡El pan de 8 cereales!...Lo sé ,no se puede comprar cada dia ese pan o tomar ese café un poco más bueno y más caro. Pero hagamóslo. De vez en cuando.

Y seguro que podremos hacer con este cambio de actitud mucho más que nuestros anquilosados políticos que solo miran cifras y déficit y no son realistas ni prácticos. Hay formas para levantar el pais pero hay que ser mimoso y cuidadoso con el trabajo y la creatividad de la gente. Y disfrutarlo. Creer en ellos. En nosotros. Ese disfrute hará que la rueda vuelva a girar de nuevo para todos.

No nos podemos conformar con menos.